Frecuencia cardíaca y ejercicio físico.


1) Conceptos. 

 La frecuencia cardiaca (Frc) se define como las veces que late corazón por unidad de tiempo. Normalmente se expresa en pulsaciones por minuto. Depende de:

  • Tamaño del corazón y funcionamiento del aparato circulatorio. Un corazón más grande necesita latir menos veces.
  • Edad, con la edad va creciendo el corazón y disminuyendo la frecuencia cardiaca.
  • Estado físico, estado de forma. Un buen estado de forma disminuye la frecuencia cardiaca, nuestro corazón late menos veces para conseguir llevar la misma sangra a nuestro cuerpo.
  • Estado psicológico – emocional. Un estado de relajación baja la frecuencia cardíaca.
  • Otros factores: la postura, factores ambientales…

   La frecuencia respiratoria (Frr), de igual modo, es el número de veces que respiramos en un minuto.

   Ambos (Frc y Frr) son valores que nos indican:

  • Grado de estrés, intensidad, al que sometemos a nuestro organismo cuando realizamos actividades físico – deportivas. A mayor intensidad, mayor número de latidos por minuto. Un esfuerzo que incrementa poco las frecuencias será suave, mientras que si nuestro corazón late muchas veces y respiramos muchas veces, el esfuerzo será intenso. Como norma general.
  • Por otro lado también nos puede indicar nuestro grado de adaptación a la actividad físico - deportiva… es decir lo preparados que estamos para realizar tal actividad.  Si al realizar un esfuerzo suave, nuestras frecuencias cardiaca y respiratoria se disparan, indicaría que nuestro estado de forma es pobre.  

   Casi siempre se da el caso de que haciendo el mismo entrenamiento, cada persona tiene una Frc y Frr, debido a que las capacidades entre las personas son diferentes.

   Cuando nos recuperamos, también observamos que hay compañeros/as a los que la Frc les baja rápidamente y otros/as a los que no. Éste es uno de los puntos clave, si mi frecuencia cardiaca baja rápido quiere decir que me recupero rápido y por lo tanto estoy mejor preparado/a para realizar ese esfuerzo.

   De forma general, siempre es mejor que nuestra frecuencia cardíaca no se eleve en exceso al realizar ejercicio físico o deporte y que al parar, baje de forma más o menos rápida.

   En cualquier caso la frecuencia cardiaca nos puede servir para controlar nuestros entrenamientos, ver nuestro estado de forma y detectar problemas. En este tema veremos algunas pautas básicas para utilizarla.

   Otros conceptos:

   Frecuencia cardiaca en reposo: es la frecuencia cardiaca que tengo al levantarme por las mañanas. Para tomarla sólo tengo que hacerlo durante unos días y anotar la media. Puede estar sobre las 50 – 60 latidos por minuto.
   Si la anoto todos los días observaré la relación que hay entre el cansancio que presento y la frecuencia cardiaca. Si me levanto muchos días con la frecuencia cardiaca alta, respecto a mi frecuencia cardiaca en reposo media, deberé bajar el ritmo, descansar porque mi cuerpo me lo está indicando con un excesivo trabajo del corazón.

   Frecuencia cardiaca máxima. Sería el mayor número de veces que mi corazón puede latir por minuto. Para ello habría que computar los latidos haciendo un esfuerzo máximo. Pero para evitar riesgos se suele hacer este pequeño cálculo:
223 – edad (años) = Frecuencia Cardiaca Máxima.
Recuerda que es un dato orientativo.

   La zona de actividad es el margen, el intervalo aproximado, en el cual debe encontrarse nuestra frecuencia cardiaca para que el ejercicio que hacemos sea saludable. Nuestra frecuencia, al hacer ejercicio debe mantenerse dentro del intervalo comprendido entre el 50% y el 85% de la frecuencia cardiaca máxima.

2) Funcionamiento del sistema cardiorrespiratorio:
  • El sistema cardiorrespiratorio está formado por:
  • El corazón, con cuatro cavidades, dos aurículas y dos ventrículos, así como los vasos sanguíneos: arterias, venas, capilares.
  • Los pulmones y las vías respiratorias: boca, nariz, faringe, laringe, tráquea, bronquios, bronquíolos y alveolos pulmonares.
3)     Cómo tomar la frecuencia cardíaca.
  • El pulso se puede tomar en cualquier arteria superficial que pueda comprimirse contra un hueso. Los sitios donde aprenderemos a tomar el pulso son el cuello (carotídeo) y en la muñeca (radial).
  • Palpa la arteria con tus dedos índice, medio y anular. No palpes con tu dedo pulgar ya que este tiene pulsación propia y te podrá confundir.
  • No ejerzas presión excesiva, porque no se percibe adecuadamente.
  • Si estás en reposo toma el pulso durante un minuto completo usando un cronómetro.
  • Si quieres saber la FC durante el ejercicio toma el pulso nada más parar durante 15seg y multiplica tu resultado por 4 para saber los latidos por minuto. Esto es así porque si tomamos el pulso durante el minuto completo el corazón va recuperándose, disminuyendo los latidos y no serian los latidos reales del ejercicio que queremos medir. Podríamos tomarlo en 6 segundos y multiplicarlo por 10, pero un solo error al contar las pulsaciones, serían 10 de error al final de la multiplicación.